Rock & Games de Rivas: Conclusiones (Ojo, tocho a la vista, Parte II y final)

    Buenas noches. Nos habiamos quedado en el descanso para la comida, al que fui encantado en primer lugar porque mi desayuno habia consistido en un cafe con leche cargado y un tomate con aceite, así que entre eso, el ambiente frio (fuera del local diluviaba) y la partida y media que había jugado, estaba hambriento. Comentando con Er Dudu y Roockie los detalles de las partidas que habiamos jugado, llegamos a la barra, que estaba en la misma sala donde se jugaba el torneo de Infinity y donde posteriormente seria el certamen de música. 

    Cuando llegamos allí, un breve vistazo nos hizo entender que los errores de organización se habían hecho extensivos al descanso para comer, al no haber ni un solo sitio para sentarse, como no fueran unas gradas que habia fuera y que, logicamente, estaban totalmente empapadas, amen de que incluso aunque no lloviera, el clima frio y nublado no invitaba a otra cosa que abrocharse el cuello del abrigo mientras se parafrasea a Ned Stark. Al igual que en la entrada de ayer reconocí la labor de publicitación del evento, es de justos reconocer tambien que durante la segunda partida nos fueron preguntando lo que queriamos. Una excelente medida... Si el resultado hubiese acompañado, claro está. A Roockie, la hamburguesa se la sirvieron con casi 40 minutos (40 minutos para pasar x la plancha un trozo de carne picada y ponerle un trozo de lechuga y unas rodajas de tomate entre 2 panes de bollo) de retraso y hubo de comersela sentado sobre un altavoz, a falta de nada mejor, de los que posteriormente se usarian en el certamen. A Er Dudu más o menos por el estilo, y a mi... Lo mio fue de coña, ya que tras hora y pico de descanso, mi hamburguesa no estaba hecha ni preparada (ni tampoco el bocadillo de panceta que pedi cuando vi el tamaño de las raciones). Durante el descanso nos dijeron que la plancha se les habia estropeado y que no podian encender la barbacoa (¿¿??) así que tardarian porque habian de hacer las hamburguesas 1 a 1. No acabo muy bien de entender la relación de hacer las hamburguesas 1 a 1 y el tiempo que tardaron, más aun teniendo en cuenta que en una sarten de tamaño medio cabian facilmente 3 de esas hamburguesas y además no todo el mundo pidió eso para comer. En fin, cuando acabó la hora de comer, enfilamos todos a seguir la partida más o menos con el hambre saciada. ¿Todos? No, adivinad quien seguía esperando su comida. Premio, ni me la habian traido, ni siquiera habian preguntado si todos estabamos servidos, así que fui directamente a quejarme de eso a la organización. Media hora escasa despues, mientras me disponia a empezar mi siguiente turno, llegaban desde organización con mi hamburguesa (fria, por cierto) y una coca-cola light que pagaba la casa por las molestias. Una pena que la hamburguesa no fuera como la habia pedido y que faltase el bocadillo de panceta, así que nuevamente me tuve que quejar. Finalmente me trajeron otra hamburguesa y al rato el bocadillo. No estaba mal, empezaba a comer 45 minutos más tarde de que los demas hubieran terminado y mientras jugaba. (cosa bastante molesta)

   Al margen de las molestias de la comida, y capeando el temporal de disparos de los Tau conseguí in extremis ganar la partida ya que en el último turno mio, pude hacerme con varios objetivos tácticos de pura suerte, pues fué debido al fallo de un par de chequeos de los tau y porque llegaron mis tropas de asalto de reserva a tiempo justo de achicharrar a los xenos. El problema fué de nuevo que el arbitro me empezó a meter prisa, a decir que esque tendria que haber terminado ya (parece que no recordaba que yo tuve que dejar mi puesto 3 veces por el problema del almuerzo, 2 para quejarme y una para recoger el pedido, así como el tiempo de comer, de pie y a matacaballo, que quieras que no te limita un poco). De hecho no llegue a mover o jugar todas mis tropas, solo aquellas que podian hacer algo de cara a los objetivos. De mala gana por las formas, terminé la partida con una holgada victoria a mi favor, aunque tuve que irme a la mesa de organización (otra vez) ya que mi puntuación no parecia ajustarse a mis cálculos. En efecto, hice el recuento y vi que no me habian sumado los dos puntos del último objetivo (el que más prisa me metieron además), pero bueno, pensando que sería un despiste por lo apresurado de mi recuento (de hecho, a dia de hoy sigo pensando que no pasó de eso mismo, de un despiste), así que se lo comuniqué tranquilamente y con ello cerré la segunda partida. Al igual que el anterior, un chico encantador, que supo aguantar con paciencia y deportividad mis momentos de desesperación (tiendo a subir el volumen de voz sin darme cuenta en algunas conversaciones, y dado que el turno que salvó todo me desesperé un poco, no me hubiera extrañado que gritara sin darme cuenta), así como contener la risa que a más de a uno de le hubiera producido el hecho de que con 4 psíquicos en mi ejército (uno de ellos, mi general, de nivel 2) no sacara otra cosa que unos en las tiradas parta ver cuantas cargas de disformidad generaba. (Afortunadamente y en previsión a situaciones así, mi ejército generaba 5 cargas por si mismo). Con todo, fué una partida muy interesante y me enseñó muchas cosas acerca de jugar contra Tau en esta edición, pues aunque en teoría les conocia lo suficiente para saber a que amenzas enfrentarme, siempre se aprende más con una partida práctica.


    Y llegó la última partida. Según mis cálculos yo iba en cabeza, o al menos dentro de los 3 primeros y así debió ser, ya que me tocó en la mesa 2, contra necrones. Este ya había jugado contra Roockie en la primera partida y por los comentarios que hizo sobre el en la comida, parecia un poco desagradable de jugar, aunque parte de los comentarios eran lamentaciones xq no fallaba ninguna tirada de salvación invulnerable con armas que producián muerte instantanea. No pude dejar de comprender esa situación, si tenemos en cuenta que venia de un turno en que no hice ni una baja. En fin para bien o para mal me tocaba jugar contra ese chico. Su lista giraba en torno a los espectros (14 creo recordar que tenia), así como 2 guadañas, 1 bombardero, 1 arca, 3 plataformas y 1 moto. Un ejército rápido (y fastuosamente pintado) aunque con poco linea que disputase objetivos, cosa que me extrañó un poco (cuando concluyó la tercera partida comprendí a que se debia esa lista más enfocada a exterminio que otra cosa, pero no adelantemos acontecimientos). Bien, antes de hacer tiradas de dados, me pidio, casí exigiendome que le dijera lo que llevaba. Bueno, no tenia nada que ocultar así que lo hizo, aunque resultaba un poco molesto el tono de interrogatorio sobre que armamento y que es lo que hacia EXACTAMENTE cada cosa, pero bueno, pense que no conocería bien las reglas de psíquicos (es lo que más preguntó) al ser necrón. Le pregunté yo y fué bastante parco en sus respuestas, así como muy apresurado, en plan "venga, vamos, vamos". Como mis anteriores rivales no habian sido especialmente pródigos en lo que a velocidad se refiere, no me pareció un defecto o algo de lo que quejarme, al contrario, se agradecía un poco de disnamismo. Parecia que por fin iba a pasar del turno 3-4 con esa partida. Tiramos y me tocó empezár a mi. Bueno, dado que los objetivos estaban bastante alejados entre si, elegí ser yo quien comenzase. Con 3 cápsulas como primera oleada, así como una unidad que infiltraba y exploraba, esperaba haceme con unos cuantos puntos en el primer turno. Su despliegue me extrañó, y tendría que haber sido ahí cuando hubiera empezado a darme cuenta de que algo no cuadraba, pero nunca habria pensado a que se debia, sencillamente pense que queria alejar a sus espectros de mi vindicator (no dejaba de preguntarme su alcance máximo): Todo su ejército lo desplegó apelotonado en torno a un unico objetivo y en un edificio, abriendo sus formación lo máximo para que no le pudiera colar mis cápsulas. Fue bastante rao que ya que jugabamos la misión en que vas sacando cartas de vórtice según el turno que tienes, 6 al principio, 5, luego 4... ect. Una vez terminó de desplegar le dije si quería robarme la inciativa y el dijo muy vehementemente "No, no, empiza tu, venga, mueve ya, mueve ya"... Un poco extrañado por tanta prisa lancé mis cápsulas... Y ese momento cai en la cuenta de que no había desplegado a mis exploradores marine. Le dije que podia haberme dicho que se me habia olvidado (sobretodo cuando le dije textualmente que si eso era todo lo que suyo para infiltrar) y su respuesta fué mirar al techo... En fin algo mosqueado los desplegué desde la reserva, (por suerte y con tanta unidad rápida y tan poca opisición suya a lo largo del tablero pude oculpar los otros 5 objetivos aunque tuve xra eso que desplegar a mi señor de la guerra y su escuadra en el edificio donde tenia intención de infiltrarme) y eso que al final casi me benefició pues cubrí con linea el objetivo más alejado de sus tropas. Ya con eso empecé a darme cuenta del tipo de rival que tenía delante y el porque de su vehemencia para que empezase a mover. Iba a tener que andarme con cien ojos porque estaba claro que no me iba a pasar ni una.



*Comienza el tocho final, la partida contra el necrón, y la decepcion sobre el torneo

    Con esta premisa sobre su forma de jugar empecé mi asalto aereo. Lancé la cápsula con el inquisidor (esta vez con invisibilidad y grito psíquico) y los centuriones frente a la ruina donde se apostaban sus espectros, así como a mi escuadra de mando en el otro edificio. Iba a desaprovechar un poco sus fusiones, pero por otro lado me aseguraba que no se acercasen muchos necrones a esa posición entre el grito psiquico del bibliotecario y los 4 rifles de fusion, mas el lanzallamas de la escuadra. Fué al lanzar la cápsula con el dread cuando reveló su verdadero rostro mi contrincante. En primer lugar empezó a decirme que no podia desplegar mi cápsula donde yo queria porque los espectros estaba a menos de una pulgada (lo medi, estaban a exactamente 0´9 pulgadas, que hay que tener cuajo) a pesar de que le decia que los salientes de la cápsula en si mismos no forman parte del casco, pero el erre que erre. Al final, haciendo virguerias me admitió a regañadientes la cápsula en una posición un par de cm más hacia su borde. Yo no queria arriesgarme mucho ya que aun recordaba la vez que se me dispersó una cápsula fuera del tablero y le otorgué de golpe a mi rival puntos por primera sangre y señor de la guerra, pero si queria destruir su arca y asegurarme de trabar o disparar a cuantas unidades enemigas pudiera mientras el resto de mi ejército avanzaba, no me quedaba otra. Afortunadamente los dados fueron benébolos y aunque se dispersó bastante, la flecha indicaba su borde de tablero y al haber deplegado tan bien sus espectros la reducción de dispersión de la cápsula tradujo eso en un punto de mira ya que no se movió. Una vez desplegué me empezó a montar el mism numerito con el dread, que si no podia sacarlo porque tenia espectros a una pulgada de las puertas, a pesar de tener sitio para moverme. Bastante asqueado (no llevabamos ni 5 minutos de partida y ya me habia colado una jugadita de antideportividad (no avisarme de mis exploradores y al preguntarle hacerse el loco mirando al techo) y ahora pretendia retorcerme las reglas) tuve que tirar de reglamento y pude meter a mi dread. Yo entiendo que le moelstase que no le saliera del todo bien la jugada de desplegar así para evitar mis cápsulas, pero chico, que le vamos a hacer... El caso es que terminé de hacer mis movimientos, lancé mis poderes psíquicos (volví a sacar un miserable 1 para ver cuantos dados tenia) y pude dar invisibilidad a mis centuriones, así como llevarme a tres espectros por delante gracias al grito psíquico y dejar a otro tocado. Y llegó la fase de disparo y con ella la primera regla absurda que se inventó:
    Mi primer disparo tenía como objetivo su arca necrona a fin de cumplir uno de mis objetivos de destruir un vehículo y ralentizar todo lo posible a su linea un par de turnos hasta que llegase el resto montados en las guadañas. Puesto que hay que asignar los disparos en orden del alcance de las armas y ya que su transporte tenia blindaje lateral 10, elegí abrir fuego primero con el lanzallamas pesado de mi dreadnought, para chicharrar a los necrones de dentro e intentar colarle un interno, o al menos un punto menos de armazón. (Además de que en el proceso pillaba a un par de espectros con la plantilla). Pues cuan grande fué mi sorpresa cuando me dijo que no podía disparar el lanzallamas porque le daba a mi cápsula (¿¿??). Le dije que en primer lugar lo que no se puede es disparar el lanzallamas a traves de tu propia unidad o señalar a una de las tuyas como objetivo. En segundo, que yo no tenia porque dar a mi cápsula, pues bastanba con girar un par de centímetros el lanzallamas para pillar igual a su arca. Y en ese momento dijo que no, porque estaba obligado a pillar el máximo area del vehículo (¿¿??). Obviamente le dije que eso no era así, pero el erre que erre. dijo que para pillar el máximo area tenia que disparar a traves de mi cápsula. En vano trate de explicarle nuevamente que los bordes salientes de la cápsula son decorativos, pues son las puertas sus bordes reales a efectos de juego, pero como quien discute con una pared. Tras 3 intentos de disparar x otros ángulos y no permitiendomé ninguno decidí no disparar el lanzallamas, sencillamente porque me parecia digno de un crio discutir por eso y no tenia intención de llamar a un árbitro x semejante nimiendad en el primer disparo del primer turno de juego (error por mi parte, tendria que haberlo hecho, pero yo juego para divertirme, no paga ganar a toda costa y generando mal rollo... y además solo con el despliegue ya tenia 4 puntos, más un posible rompelineas suponiendo que lograse mantener mis cápsulas en su zona de despliegue al final de la partida si no lograba que nada más llegase allí). Así que abri fuego con el cañón de fusíon. Impacto interno, tira para esquivar con cobertura extra por tener mas del 25% del vehiculo a cubierto... y falla. Explosión del mismo y muerte de 4 necrones así como una herida a un espectro, así como otro punto por misión vórtice y la primera sangre para mi. Bueno, eso compensaba lo del lanzallamas. Acto seguido los centuriones abrieron fuego sobre los espectros, desintegrando a otros dos, mientras el sargento dividia el fuego y remataba al que habia dejado con una herida antes. La verdad, estaba siendo un turno condenadamente bueno, tanto en disparos como en objetivos de vórtice, mi principal preocupación. No logré hacer nada más y le pasé el turno, con un excelente 0-6. El no lo dudó, cargó sobre los centuriones con sus espectros y hizo lo propio al dread. No me preocupé por los centuriones, entre su invisibilidad, su alta resistencia, ¡el no hay dolor!, sus dos heridas y su armadura de 2+, casí prefería que sus espectros se quedasen trabados y no se dedicasen a atravesar edificios para ir a por objetivos. Empezó a abrir fuego de tesla contra mis marines y mis motos, lanzando los dados a toda velocidad y sacando varias heridas, aunque afortunadamente no me supusieron más que la muerte de algunas motos. Cuando lanzó al combate a sus tropas contra el dread quise hacer fuego defensivo y dijo que no podia por ser vehículo (segunda regla que se inventaba). Le dije que los bípodes podian y dijo que no era así, enseñandome en el reglamento la regla que dice que un vehiculo no puede, solo los pasajeros, si los hay. Pensando que el errado era yo, lo dejé pasar (es lo que tiene que no te enseñe las reglas especiales de bípodes y tener buena fe en el rival). Mi dread fuñé destruido, aunque había cumplido con creces su objetivo de relantizar la linea (aunque me dolío bastante, su lanzallamas pesado y el puño podian haber hecho aún bastante daño, así como el cañón de fusión). Tambien hizo un par de ataques de pasada con las plataformas necronas, llevandose a mas motoristas por delante, pero con todo logré pasar los chequeos. En el siguiente turno, me salió un objetivo misterioso (segun las reglas habia que tirar cuando los ocupase), pero empezó a decir que no, que no habia que tirarlos (que casualidad, ¿era porque me daba el doble de puntos?). Me fui al arbitro y dijo que lo que pusiera en la misión. Así que seguimos jugando. Esta vez no logré hacer gran cosa, pues mis centuriones estaban trabados y el restod e mis tropas muy alejadas, pero por suerte logré sacar a los exploradores, con lo que pude hacer avanzar a mi séquito inqusitorial ya que su objetivo quedaba ocupado por los francotiradores de la 10º compañia. Logré un par de puntos por misiones y descarté otros, pero poco más. En su turno, le llegaron sus dos guadañas y empezó a repartir fuego entre mis tanques. Ahí si que se notó la potencia de fuego y varias de mis unidades cayeron. Además cargó con su señor de laguerra en la plataforma a mis motos, aniquilándolas. Tambien lanzó un rayo de la muerte sobre mis centuriones en combate. Le pregunté si podía hacer eso dado que eran invisibles y estaba trabados pero insistia en que si. Cuando le pedi el codex dijo que le preguntase al árbitro, quien le dió la razón, auqnue ninguno de los dos se molestó en consultar el codex necron. Las cosas empezaban a pintar feas para mi, pero no me preocupe, le llevaba una amplia y holgada ventaja en puntos de misiones y tenia todavia tropas mecanizadas más que suficientes para hacerle frente y seguir yendo a por objetivos. Llegó mi turno 4 y empezaban a meternos prisa, cometiendo yo un error grave y fué que olvidé sacar mis 4 cartas de objetivo de ese turno. Fué al mover mi primera unidad a un objetivo y cumplir el que tenia pendiente cuando cai en la cuenta y se lo dije. Su respuesta fué "Ah, mala suerte, haberte enterado antes". Bastante molesto con su actitud le dije que podría tener un poco de deportividad y que llevaba toda la partida comportandose como un cerdo (en las hojas de cada jugador se valoraba la deportividad) y me espetó que eso era un torneo, que el jugaba para ganar y que en pachangas de sus amigos "igual le hubiera dejado a alguno hacerlo" y que yo no tenia derecho a insultarle y faltarle al respeto. Le contesté que el respeto hay que ganarselo y que si se comporta como un puerco con sus rivales se expone a que se lo llamen. En ese momento me plantée muy seriamente recoger mis tropas y darle la partida por ganada dado que me estaba poniendo cada vez de peor humor con su actitud, pero me contuve. Según mis calculos y por lo que estaba oyendo de mis otros contrincantes, el torneo era mio, iba el primero en puntos de vórtice y estaba pasandome al necron por la piedra en materia de misiones de vórtice de guerra, 9 a 2 si mal no recuerdo ibamos en ese momento (a efectos de exterminio era el quien me estaba dando la del pulpo, pero dado que el exterminio no puntuaba, no me preocupaba mientras me quedasen tropas para ir a por los objetivos, auqnue me costaria más los de de matar unidades completas), así que me tragué lo que pensaba de el y seguí jugando. En su cuarto turno movió una guadaña y despues dijo "no, mejor la pongo en este otro sitio", pero esta vez me había decidido a no seguir pasandole cosas, vista la actitud que estaba teniendo conmigo, así que le espeté un "No, la has movido y ahí se queda... mala suerte, haberte enterado antes de que te venía mejor ahi" y entonces, para absoluto alucine mio por como se podía ser tan cínico y tan jeta me empezó a decir que "si queria que jugasemos así", echandomelo en cara y como si estuviera dolido por haberle hecho lo que el llevaba haciendome toda la partida (mi infiltración, la capsula del dread, los disparos del dread, mis misiones...) Sin embargo (sin acabar de salir de mi estupor por su cinismo) y decidido a que no me colase más jugarretas no me arredré, llamé al árbitro bastante enfadado por la actitud de mi rival y le pedi que no se alejara de la mesa, a lo que accedió sin problemas porque dijó que estabamos empezando a gritar. Yo me estaba poniendo visiblemente nervioso y empecé a cometer pequeños errores que el árbitro o no veia o no queria ver, como chequeos que mi rival no realizaba, o dados de heridas que se olvidaba tirar (saqué brazo de hierro con una sacerdote rúnico contra su plataforma con el señor de laguerra y solo cogió 1 de los 3 impactos que le colé. Para cuando me di cuenta de ello ya era tarde para rectificar, momento en el cual volvi a plantearme recoger mis cosas, pero de nuevo me contuvo el hecho de que estaba ganandole por goleada pese a todas sus malas artes). Empezaba mi quinto turno y por fin llegaban mis tropas de asalto, aunque poco pudieron hacer, ya que las guadañas y el bombardeo barrian el mapa a su antojo. Me plantee recular a mis marines y hacer que le costase más dispararme, pero me obligué a mi mismo a mantener las posiciones, pues debia ocupar los objetivos el mayor tiempo posible para seguir ganando puntos. Con mis defensas rotas, empezó a ir exterminando unidades una por una. Al terminar, a mi aun me quedaban tropas. El árbitro dijo que quedaban 5 minutos y terminaramos, pero mi rival dijo que aun podiamos seguir. Como era cierto (el jugaba muy rápido, sobretodo al tirar dados, aunque misteriosamente le salian menos resultados de 6 con sus tesla cuando el árbitro miraba... pero prefiero achacarlo a "una simple coincidencia" (notese el sutil y discreto tono sarcástico)) así que nos dijo que tirasemos para ver si seguiamos... Y salió en el dado que se jugase el turno 6. Logré tener suerte y arañar otros 2 puntos de victoria. El estaba obsesionado por exterminarme (cosa incomprensible para mi, pues suponiendo que lo lograse, no tenia capacidad de ganarme por objetivos en un solo turno, y eso suponiendo que le saliera el dado). Disparó a una unidad de marines (la última que me quedaba, aparte quedaban los exploradores en un objetivo y que por puro azar habian logrado derribar su bombardero en el anterior turno, pero no llegaba a dispararles con nada en el sexto turno) y mató a 3 de los 5 que quedaban vivos. Empezó a meterme prisa para tirar el siguiente turno (la gente ya estaba recogiendo las cosas) mientras el árbitro nos apremiaba, momento en el que caí que con tantas prisas no habia hecho el chequeo con mis astartes. Aquí reconozco que obré mal, pero decidí pagarle con su misma moneda y viendo que el árbitro era un ente meramente decorativo y que su función al parecer era resolver dudas y meter prisa más que arbitrar como tal, me callé que debia realizar el chequeo. Tiré el dado deseando irme a casa de una vez... Y salió jugar el turno 7.
    Mascullando por lo bajo acerca de mi suerte, pero tranquilo porque sabia que el ya no podria ganar ni aunque me exterminase, ante la falta de turnos para ocupar objetivos (me temia que tuviera algun as en la manga en plan duplicar puntos o algo asi, que aunque no le hiciera ganar pondria en aprietos mi clasificación), retiré por fin a mis marines del objetivo y empezaron a retroceder para refugiarse en cobertura, momento en el cual me dijo "eh, no has chequeado antes". Como he dicho, reconozco que obré mal, pero fué sumamente satisfactorio ver su cara cuando le dije "bueno, igual que tu con el chequeo del turno 5, que no lo hiciste, ¿no? Habermelo dicho antes". Finalmente en su turno destruyó esa unidad y empezó a disparar con todo lo que tenía a mis exploradores. Finalmente y con el último de sus disparos, con una salvación de 4+ (es decir, 50% de probabilidades) mató a mi ultimo explorador, y, sin darnos ni las manos, terminó así la partida y el torneo...

   Yo estaba muy cabreado, de muy mala leche y con dolor de cabeza, asqueado de alguien tan repelente. El empezó a gritar "Le he exterminado, le he exterminado". Me extrañaba bastante su obsesión, más aun cuando fue corriendo a decirselo al árbitro que ya venia con nuestras hojas. El arbitro me contó que no me lo había dicho antes, pero que la partida era mia en el turno 5 y me habia dejado exterminar por obcecarme y picarme con el, que habia actuado como un crio. Le explique que yo no podia abandonar los objetivos y que además la batalla habia seguido de pura casualidad, por las tiradas de dados. Le dije que le habia ganado por 13 a 6, pero el me contesto "ya, pero te ha exterminado". Mi rival empezó a decirme que la culpa era mia, que no sabia jugar y que habia ganado limpiamente, así como que me debia disculpar porque le habia faltado al respeto antes y el a mi no (se ve que tomar a la gente por imbecil no es faltar al respeto). Le dije de muy malas formas que "En la mesa y el juego se conoce al caballero" y el empezó a decir que en los torneos se juega unicamente a ganar. Intenté explicarle que yo juego a ganar, pero no a toda costa, que tengo un mínimo de dignidad y amor propio y que ya sea jugando al rugby, a warhammer o al monopoly se aceptar las derrotas pero tambien se ganar y procuro hacerlo siempre limpiamente y dando la cara, sin subterfugios como el. ¿Su respuesta? "Olvidame chaval, te he ganado, ademas puedes preguntar a cualquiera y todos te dirán que ha sido un placer jugar conmigo, que juego duro pero limpio" (Estuve muy tentado de decirle a Roockie que se viniera y repitiera lo que opinaba sobre el y su "forma limpia" de jugar, pero decidí no calentar los ánimos innecesariamente, además de que lo más seguro es que el otro dijera "claro, te apoya porque es tu colega"). Me acerqué a la mesa de organización a preguntar por el resultado final y dijeron que estaba muy claro que habia ganado el, que porque preguntaba eso.

 Yo no entendía nada, pero pronto lo iba a comprender.

    Resulta que un par de dias antes del torneo, habian cambiado las bases. Se convertia en un 10/5/1, donde el 10 eran los puntos que ganabas por victoria, 5 por empate y 1 por derrota, con el añadido de que si exterminabas a un rival, te llevabas 30 puntos y tu contrincante 0 puntos y los puntos de vórtice se utilizarían solo para desempatar. Yo no daba crédito a mis oidos, a mi nadie me habia avisado, ni en nigún sitio, blog, foro o tabloide habian cambiado las normas, ni por supuesto lo habian recordado a la gente antes de empezar el torneo. Se cayó una venda delante de mis ojos, ahora entendia la obsesión de mi rival por el exterminio y jugar tan rápido, pues en circunstancias normales no lo habria logrado (6 turnos y sin ir a matacaballo), así como el comentario del árbitro "si, pero te ha exterminado". Increible pero cierto. Pregunté a otros jugadores. Nadie sabia aquello, ni ninguno de los 3 miembros del Gordo Xenos que allí estábamos, ni el tau, ni el aguardia de mi primera partida ni Danidjh (jugador con el que ya habiamos coincidido en Plasencia) ni otro jugador marines que estaba a mi lado. Al menos el 50% de los participantes habiamos acudido con unas listas y un enfoque totalmente opuesto al real. Mis compañeros del Gordo Xenos se habian enterado al final de la segunda partida, mientras yo seguía jugando contra el Tau, y fué de pura casualidad. Los únicos que parecian saberlo eran los más allegados a la organización. Y no acababa ahi nuestra indignación. El sorteo de premios, que debia realizarse segun las bases a la vez de la entrega de trofeos resultó que la habian cambiado y ahora habia que quedarse hasta el final del concierto. (Era muy obvio que con la lluvia no habia asistido nadie y pretendian llenarlo a costa de los participantes en el torneo). Por supuesto si te ibas perdias el derecho al sorteo aunque tuvieras el número premiado y el propio primer premio, resulto ser un vale de tienda condicionado a un volumen de compra. Repugante, habiamos sido vulgarmente estafados y engañados. Estabamos hartos, no me iba a quedar allí ni un segundo más del necesario, les hice saber mi opinión a los organizadores y entonces si, dijeron que sentian mucho no haber avisado, que debió de pasarseles decirme los cambios de bases (a mi, y a medio torneo, claro). El ganador (el necrón), "casualmente" si que lo sabia, por eso llevaba aquella lista tan rara para objetivos (sus unicas unidades verdaderamente móviles eran voladores, que ni ocupan ni disputan). Recogiendo las cosas me juré a mi mismo no volver a un torneo o un evento organizado por semejante gentuza. Felicité al subcampeón y nos fuimos Er Dudu, Danidjh, su novia que habia venido con el a verle, y yo (Roockie se habia ido ya de alli visiblemente asqueado) a por el coche. Por el camino me disculpé con el organizador, por pura y simple cortesia, diciendole de buenas maneras que la proxima vez, se asegurasen de que las bases les llegaban a todos. Les dije que ante la duda echasen un ojo a nuestras bases, pues las colgamos siempre con mucha antelacion y son muy similares a las usadas en Goblin Trader. Me despedí y al salir felicité al ganador con un sencillo "Enhorabuena". No me respondió.

    Esta captura de pantalla la hice el dia 2 de diciembre del 2014. Al lado se ve una noticia publicada en El Mundo ese día y la pagina abierta es, como se puede leer la posada del friki. Como se puede ver ni siquiera en su propia web avisaron del cambio de bases.


     A la vuelta a Madrid,  en el coche con Er Dudu, visiblemente cabreados los dos, empece a darle vueltas y me di cuenta de que lo que tendria que haber hecho es exigirles que me devolvieran el dinero y decirles las cosas claras. A dia de hoy lo sigo pensando, no habia nada por lo que disculparse, más allá que unos gritos provocados por la asquerosa actitud tramposa y jeta de un infeliz cuya única felicidad es ganar un torneo falseado masacrando al rival mientras retuerce las reglas e intenta colarle cuantas pueda a fin de facilitar su victoria (y a pesar de todas las que me hizo le costó Dios y ayuda ganarme) y que ellos mismos se habian ganado a pulso que les dijera cuanto opinaba. (Compañeros de facultad y amigos incluso me han aconsejado denuciarles por estafa pero paso. Una vez publique esta entrada no quiero saber nada más de ellos. De los errores se aprende y ya se con que clase de calaña no volver a juntarme, ni asisitir a sus eventos, ni darles más atención ni tiempo del que se merecen. Ni yo podría caer más bajo, ni ellos llegar a más consideración y no voy a gastar mi tiempo y dinero en pleitos absurdos).

    Mala comunicación, mentiras, cambios sin avisar a la gente, ausencia de arbitros, gente incapaz de jugar limpio, nepotismo, falta de respeto al rival y al participante... Esa es mi opinión sobre el Rock  & Games. Hay quien me ha advertido acerca de que En la posada del friki, cabeza visible de la organización del evento, no se toman nada bien las críticas. Bueno, pues esto va para aquellos que les haya molestado mi crítica sobre su evento.

 



    Nada más que decir al respecto.



Barahair